EL RINCÓN DE GUIDO
Oscar Avilés y Arturo Zambo Cavero, un duo criollo inolvidable |
Sin lugar a dudas el maestro Oscar Avilés fue indiscutible catedrático de la jarana, de ese bordonear sin par. Fue una institución dentro de la música criolla. Por algo se le conoció de siempre como La Primera Guitarra del Perú. Don Oscar es uno de los artistas que más contribuyó, no solo en el país sino también en el exterior al prestigio de nuestro folklore, de manera especial el vals y la jarana criolla.
CHALACO. Nacido en el Callao, el maestro hizo sus
primeras correrías jaraneras en Lima, ya sea en el Rímac, los Barrios Altos o
La Victoria. Era un mozuelo que ante la ira de su progenitor, don José Avilés,
tenía que esconderse en el techo de una casa vecina o en el ropero – de
aquellos tiempos-, para poder pulsar su compañera inseparable, la guitarra, ese palo trinador
que años más tarde lo cubriera de gloria.
DE TU Y VOZ- Oscar Avilés se codeaba con los entonces
grandes de la canción criolla y es así que
por primera vez integró una agrupación llamada Trio Mundial. Luego vendrían Los Trovadores del
Perú, Los Morochucos y finalmente Fiesta Criolla
20 AÑOS Tendría
20 años por aquel entonces cuando con Augusto Ego Aguirre y Alejandro Cortéz Los Morochucos, tuvieron la “osadía” de
presentarse en la boite Embassy, sagrado
templo de la época de oro de la farándula nacional. Demás está decir que poco o
nada de importancia le dio el selecto público asistente al intrépido trio. Al
término de la primera interpretación, el público enfervorizado los aplaudía de
pie y de manera especial a aquel joven de pelo engominado que deslumbrara, que
hacía maravillas con la guitarra
Afamados grupos criollos formó Oscar Avilés siendo el
primero el Trio Mundial, cuyas actuaciones se daban entonces en Radio Mundial
de la cuadra 7 del Jirón de la Unión. Es
por ello que el maestro solía pasear por la citada vía como rememorando recuerdos
maravillosos En 1947 integra Los Trovadores del Perú con Miguelito Paz, Oswaldo
Campos y Panchito Jiménez, recorriendo con ellos casi todo el país para luego
extender la gira a Bolivia y Brasil. Al año siguiente lo llama el doctor César
Miró para que se haga cargo de del conjunto de cuerdas de Radio Nacional. Su inquietud musical lo lleva a fundar la escuela
de guitarra como aporte suyo para formar
nuevos valores.
PALACIO Y
TEMPLO:. Una de las más esplendorosas vivencias del maestro, fue cuando en
Brasil actuaba con unos 100 músicos pues el severo crítico musical Joao Silva Dos
Santos escribe sobre él maestro : Don Oscar Avilés tiene alma de un palacio vienes y de un templo inca.
El maestro y los Morochucos me concedieron el honor de ser su amigo. |
SE CASA: Toda Lima se volcó el 8 de diciembre de 1957
a la Iglesia Virgen del Pilar día en que don Oscar contraía nupcias con Lucy
Valverde Lynch. La nave estaba abarrotada y en la calle se apiñaban unas cinco
mil admiradores y entre ellos unos 200 guitarristas. Fueron testigos por el Primera
Guitarra del Perú, Augusto Sarria, el doctor Francisco Frala, Camilo Toledo,
Manuel Valcárcel, Cesar Avilés y Alejandro Miro quesada, mientras que por la
novia lo fueron Hernando de Lavalle, el comandante Jorge Allende, Angelo
Valdini, Rafael Ventura, Carlos y Francisco
Valdez. Luego de la ceremonia y fastuosa recepción la pareja del año viajo por todo el norte en
su luna de miel.
MALA RACHA: También tuvo mala racha en su carrera como que el 18 de octubre de
1953 tuvo un accidente automovilístico en la cuadra 10 de la avenida
Mariátegui. El 21 de julio de 1955 fue multado por el municipio de Castilla, Piura, por llegar
tarde a una actuación en el coliseo Ramón Castilla. En agosto de 1971 fue
operado de una vértebra cervical, corriendo rumores de que había quedado semi
paralítico, pero felizmente los rumores eran totalmente falsos y es más, antes
de lo previsto, don Oscar Avilés fue dado de alta y tres meses más tarde retornó a los escenarios para deleite de
sus admiradores o sea todos los peruanos.
FIESTA CRIOLLA: Una de las más grandes alegrías del
gran trovador fue cuando con Panchito Jiménez como primera voz, el ronco
Humberto Cervantes segundo voz, Pedrito Torres el mejor castañuelista de todos
los tiempos, Arístides Ramírez un señor cajón y Nicomedes Santa Cruz que se
arrancaba con al compás del socavón con décimas del Perú y su tradición,
formaron el recordado conjunto Fiesta Criolla, el más hermoso, el más grande
conjunto del cantar ciudadano.
Se dice en el converse criollo que en las jaranas allá
arriba, faltaba una guitarra cunda, palomilla, dicharachera jaranera, cadenciosa
y de quiebre en el preciso momento de mover la cintura…. “¿Dónde conseguir una
guitarra así?... mama mía, que tal dilema” decía San Pedro a quien no le quedó
otra opción que bajar a este valle de lágrimas, encontrar al genial guitarrista
y llevarlo consigo. Ello sucedió. El 05 de abril del 2014. Ya sabemos dónde se
encuentra el maestro Oscar Avilés Arcos para ir a su encuentro cuando nos llame
San Pedro, es decir si es que nos llama como lo hizo con el inolvidable
MAESTRO, SEÑOR Y AMIGO.
No hay comentarios:
Publicar un comentario